domingo, 11 de marzo de 2012

El Cretácico superior de Cortes de Pallás. Parte II

En mis relatos acerca de los distintos afloramientos cretácicos en Cortes de Pallás (El Cretácico inferior  en Cortes de Pallás, Geología en otoñoEl Cretácico superior en Cortes de Pallás, parte I y la serie acerca del final del Cretácico, dividida en tres capítulos en Vestigios de un mar en retirada) existen dos hiatos, uno de mayor entidad que el otro. Lo cual me da la oportunidad de hacer dos cosas: la primera es explicar lo que es un hiato en Geología. La segunda corregir esta situación.

Primero lo primero. ¿Qué es un hiato? Pues en una sucesión estratigráfica decimos que existe un hiato cuando en  el intervalo de tiempo representado en las rocas de la sucesión hay un hueco, esto es, un momento que no está representado. Eso puede deberse a que no hubo deposición o a que, habiéndose producido ésta, un episodio de erosión posterior haya eliminado estos materiales. Y una vez aclarado esta pequeño juego de palabras, ¿dónde están esos hiatos en el relato? El primero de ellos está entre la formación Calizas de Aras de Alpuente (véase Geología en otoño) y la formación dolomías tableadas de Villa de Ves (véase El Cretácico superior en Cortes de Pallás, parte I). El segundo está entre la formación Villa de Ves y los materiales de la formación Calizas y brechas de la Sierra de Utiel (Vestigios de un mar en retirada). Hoy nos ocuparemos de rellenar el primero de estos espacios vacíos en la narración.

Un buen lugar para estudiar este lapso de tiempo está en el sendero que sube desde Cortes hasta la Muela homónima y que ha sido bautizado como Ruta Cavanilles (SL-19). Antes de comenzar el estrecho congosto conocido como 'El Gollerón' aparece una pared prominente que forma un resalte potente en el terreno. Este lugar se conoce como Cueva de la Mora. Además, está equipado con vías de escalada deportiva, lo que constituye otro foco de atracción.

Cómo llegar desde Cortes. Tomada del blog de
 Manolo Benet unsociability.org

El contexto. En el sector valenciano de la cordillera ibérica por encima de los materiales carbonatados de la formación Aras de Alpuente (donde encontramos barras calcareníticas propias de ambientes marinos poco profundos y fuertes corrientes de marea) aparece un intervalo de margas limolíticas verdes muy características que, por su extensión regional, fácil reconocimiento y notoria expresión morfológica se designó inicialmente como capa guía y actualmente constituye la formación Margas de Chera. Constituye el límite entre el Cretácico inferior y medio. La deposición de estas margas debió de producirse en un ambiente poco energético y quizá el color verdoso indica condiciones reductoras propias de medios poco oxigenados. En Cortes son totalmente azoicas (es decir, no contienen fósiles). De hecho, tampoco se aprecian señales de actividad biológica en forma de icnofósiles. Como veréis su contacto a techo es muy neto y el acusado contraste entre las facies a cada lado de éste sugiere un periodo de erosión. Este tipo de discontinuidad estratigráfica se conoce como 'paraconformidad', ya que al no existir eventos tectónicos entre la deposición de unos y otros materiales da la impresión que se han depositado de forma continua (geométricamente hablando, claro). Podéis repasar este concepto en esta entrada anterior sobre las discordancias.

Vista general del afloramiento. El resalte inferior pertenece a la
 formación Calizas de Aras de Alpuente. Fuente: Unsociability.org


Contacto entre las margas de Chera y las Dolomías de
 Alatoz, ejemplo de paraconformidad. 

Sandrine Kuckuck examina el límite entre el Cenomaniense
 inferior y el medio
Detalle de las margas de Chera. Casco para escala

Por encima encontramos calcarenitas dolomitizadas que en la base presentan un mayor contenido detrítico, en algunos niveles muy acusado, lo que las hace muy deleznables y les confiere un aspecto oqueroso (un escalador no deja de percibir esto ya que es una mala cualidad en la roca cuando se trata de buscar presas). Estos niveles están muy bioturbados y presentan un aspecto más masivo. También se aprecian multitud de huecos donde ha precipitado a posteriori calcita recubriendo toda la superficie interior (geodas).

Carlos Villegas examina el nivel de dolomías detríticas. Las flechas horizontales
 señalan dos geodas de calcita. Las verticales galerías de Thalassinoides isp.

A continuación aparece un nivel ferruginitizado que sugiere condiciones muy someras (también aparecen icnofósiles propios de ambientes de alta energía, por ejemplo del icnogénero Skolithos isp. y Ophiomorpha isp., que parten de este nivel). Este tipo de galerías verticales son los domicilios de animales suspensívoros, que necesitan anclajes fuertes en medios muy energéticos. En el caso de Ophiomorpha isp. una característica básica es el recubrimiento que estabiliza las paredes de la bioconstrucción.

Manolo Benet examina el nivel ferruginoso muy bioturbado

Detalle del nivel ferruginoso. Las flechas horizontales señalan
 ejemplares de Skolithos isp.  El mosquetón mide unos 10 cm

Otro detalle. Las flechas horizontales señalan dos ejemplares de
 Ophiomorpha isp. La flecha vertical señala  el recubrimiento de pellets
 que estabiliza la pared de uno de ellos

Por encima viene una sucesión de dolomías detríticas en bancos decimétricos, con estratificación bastante definida, muy bioturbadas, que adquieren un carácter masivo hacia techo. A lo largo de la sucesión se aprecian un par de ciclos en los cuales los niveles más margosos o arenosos dan lugar a entrantes, como la citada Cueva de la Mora (que no es más que un abrigo excavado a favor de los materiales más deleznables).

Vista general del afloramiento. Observad el aspecto tableado en los niveles
 inferiores y masivo a techo

Estos materiales pertenecen a la formación Dolomías de Alatoz y a techo limitan con la formación Dolomías de Villa de Ves. Como veis representan un ambiente marino somero y energético con variaciones acusadas del nivel del mar (probablemente debidas a la colmatación de la cuenca y la generación de nuevo espacio de acomodación de sedimentos en el contexto de rifting general).

Sandrine examina los niveles tableados.Observad
 las geodas a la altura de su cabeza y el aspecto oqueroso
en primer término
Fijaos en el cambio de condiciones que se han producido desde el Albiense - Cenomaniense inferior. Una tendencia clara a ambientes más someros y menos energéticos (que culminan con la formación margas de Chera) y el comienzo de un nuevo periodo de subida del nivel del mar (desde aquí hacia arriba). Como ya hemos visto también lo que ocurre a continuación (Dolomías de Villa de Ves) vemos que las condiciones en la zona de Cortes nunca llegan a ser de mar abierto, siendo en su mayor parte someras, con medios aislados, al menos en parte, y oscilaciones de pequeña magnitud del nivel del mar, pero suficientes para que en algún momento se produjese la exposición subaérea en medios de backshore.

Bueno, pues ya está. Espero que no resulte muy lioso, pero es que me he dado cuenta de que puede ser interesante completar las descripción de los afloramientos cretácicos de Cortes, ya que constituyen las unidades de relieve más características del término municipal. Prometo hacer un artículo resumen cuando acabemos la serie para poner todo en su lugar. De todos modos, aunque la parte 2 de este post sobre el Cretácico superior sea previa a la parte 1, ¡un estudioso de la Geología debería estar acostumbrado a este tipo de inversiones 'tectónicas'!


4 comentarios :

  1. Mi más cordial enhorabuena junto a mi gratitud por este nuevo artículo.
    Me sigue asombrando tu estilo narrativo de acontecimientos geológicos con los datos arrancados a las piedras sin robarlos. Me asombra el estilo de novelar la historia de millones de años y plasmarla en unas pocas líneas. Me asombra la captación de la atención que imponen tus relatos, que obligan a seguir la trama como si de la propia comarca se tratara. En fin... Me asombran tantas cosas de tus crónicas que no puedo frenar el impulso de hacer explícita mi gratitud y felicitación.
    Esta admiración me obligará a difundirlas hasta donde las limitaciones lo permitan y serán ejemplo de la satisfacción que se puede gozar si se aprende a leer en las rocas. Y por encima de tu trabajo, que lo hay, gracias por compartir tu virtud.

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    1. Muchísimas gracias, José Luis. Es una fuente de satisfacción inmensa saber que alcanzo parte de los objetivos que me planteo al relatar mis 'aventuras': transmitir a otras personas la emoción que la geología me produce y la sensación de maravilla ante los abismos del tiempo y la forma en la que somos capaces de interpretarlo. Eso es lo que da sentido a mi esfuerzo (si es que lo es, en realidad). Con que una persona encuentre útil este modesto trabajo de divulgación me siento retribuido con creces.

      Gracias de nuevo.

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  2. Muy interesante y muy didáctica la visita guiada.
    Gracias por compartir esta aventura geológica.
    Saludos

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    1. Gracias a ti por visitar Aventuras geológicas.

      Un saludo

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